Ni el desfalco ni el deterioro económico impidieron trabajar por Veracruz
Xalapa, Ver., 16 de noviembre de 2019.- Al reivindicar el movimiento por el que arribó al Poder Ejecutivo, el gobernador Cuitláhuac García Jiménez señaló que esta administración se caracteriza por la austeridad y honestidad. En el marco de su Primer Informe dio a conocer los logros alcanzados entre el 01 de diciembre de 2018 y octubre de este año:
En inversión pública: destinamos 5 mil 592 millones de pesos al rescate del norte, sur y zonas indígenas que, por años, sufrieron el desdén de gobiernos pasados que sólo hicieron obras de relumbrón. Hoy, en la Huasteca Alta 35 obras están en proceso, con una inversión de 138 millones de pesos, de los cuales el 54 por ciento es para infraestructura carretera; aparte, 448 millones del monto compartido con la Federación.
En materia de salud: el gobierno de la Cuarta Transformación subsana la falta de servicios, equipamiento, abandono de infraestructura y desabasto de medicamentos, lo que dejó sin atención a dos millones de veracruzanos.
Durante el primer año entregamos 21 nuevas unidades médicas y 77 más fueron remodeladas; ahora, el abasto se sitúa en 82 por ciento. Asimismo, invertimos 584 millones en equipamiento, mobiliario e instrumental médico; mientras que, para comprar fármacos y material de curación, mil 185 millones, 60 únicamente para tratamientos oncológicos.
Privilegiando la honestidad en el manejo de los recursos públicos eliminamos los moches, el coyotaje y ya no hay empresas favoritas ni terceros beneficiarios. Tanto las obras carreteras como en salud permanecen en Veracruz, pues el 96.3 por ciento de las empresas contratadas son locales.
En materia educativa: vamos a transformar el estado y el país, logrando así que la riqueza cultural de nuestro pueblo impida las formas de inequidad social implantadas por el neoliberalismo; por ello, echamos abajo la mal llamada Reforma Educativa, en el mes de abril, y para dar certeza laboral a docentes y administrativos basificamos a más de 20 mil.
Asimismo, entregamos 2 mil 378 plazas a profesores de nuevo ingreso (341 promociones en la función), correspondientes a la convocatoria 2018-2019, y regularizamos 386 asignaciones derivadas de los concursos del ciclo 2016-2017.
Como siguiente paso, facilitamos el acceso a la educación a los sectores sociales populares y vulnerables destinando 75 millones de pesos a cinco programas y con la beca especial para atención a hijos de víctimas de violaciones de derechos humanos; así, hemos otorgado 31 mil 563 estímulos por parte del Sistema Estatal de Becas. Los montos se duplicaron en el nivel básico.
Junto con la Coordinación Nacional de Becas para el Bienestar “Benito Juárez” entregamos 297 mil 293 apoyos a estudiantes de Educación Básica, 220 mil 703 de Media Superior y tres mil 544 del Programa “Jóvenes Escribiendo el Futuro”.
Mediante el Instituto Veracruzano de Asuntos Indígenas incorporamos a 3 mil 189 becarios de las zonas indígenas marginadas para que participen en actividades de capacitación, alfabetización, en pequeñas empresas y negocios o instituciones públicas.
Trabajar por la educación es un gran reto que se logra con un plan sexenal; a un año de gobierno recuperamos 930 acciones y 354 obras, además, atenderemos otros 236 planteles. De igual manera, en colaboración con 107 ayuntamientos, validamos la construcción y/o rehabilitación de 760 espacios educativos en 673 escuelas.
Con la estrategia “Sembremos Bienestar Común”, la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL) realizó 240 diagnósticos de pobreza y vulnerabilidad en 162 municipios, de modo que los programas sociales ya no sean utilizados con fines partidistas; por esta razón, fue integrado el Padrón Único de Sujetos de Derecho y Administración de la Información Territorial.
El programa “Mujeres Emprendedoras” otorga 5 mil pesos a cada persona que inicia una actividad económica, siendo entregados 13 mil 414 apoyos. Con “Módulos hacia la Autosuficiencia Alimentaria” entregamos gallinas ponedoras y equipamiento para huertos agrícolas; a la fecha, han sido conformados 7 mil 300 grupos. Ambos esquemas benefician a 82 mil 856 personas, con una inversión de 125 millones 470 mil pesos.
La estrategia “Proveer, Desarrollo y Bienestar” ha iniciado acciones de bienestar en cuatro microrregiones: Acayucan, con 44 techos y 86 muros; Amatlán de los Reyes, 57 muros, 66 cuartos-dormitorio y 102 estufas ecológicas; Papantla, 124 pisos, 67 techos, 124 estufas y 12 electrificaciones de vivienda, y Zacualpan, 92 pisos.
El Programa de Mejoramiento a la Vivienda ha beneficiado a 62 mil 887 personas, con una inversión de 468.9 millones de pesos; 60 millones para obras de electrificación rural y 408.9 en estufas ecológicas, cuartos-dormitorio, pisos, techos, muros y supervisión de obra. Mientras que el Instituto Veracruzano de la Vivienda realizó mil 636 acciones de ampliación en 121 localidades de alta y muy alta marginación, generando 2g mil 283 empleos.
En materia de seguridad: el Gobierno Estatal ha basado sus acciones en cuatro ejes: dos dirigidos a atacar el problema de fondo y dos a la contención, que consisten en Apoyo a los jóvenes, Apoyo al campo, Mejora de las condiciones laborales de la Policía y Coordinación con fuerzas federales.
Como parte del Programa de Dignificación Policial, el salario de los elementos operativos fue aumentado en dos ocasiones, significando un 20.6%. Asimismo, se llevó a cabo la adquisición de 50 patrullas en compra definitiva y 110 mediante un esquema de arrendamiento.
Sobre acciones específicas de violencia, el mensaje es claro: “los que solapaban a los criminales ya se fueron, quien atente contra la vida de una persona o violente la ley enfrentará, invariablemente, el castigo que la misma le tiene reservado. En Veracruz, ya se acabó la impunidad”.
De acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), la incidencia delictiva en Veracruz tuvo una disminución del 20.82%, de enero a agosto, con un promedio de 407.76 delitos por cada 100 mil habitantes, en comparación con los 515 en el mismo periodo de 2018.
La capacitación de los elementos y el seguimiento a la formación profesional ha permitido sensibilizar al personal en el respeto a los derechos humanos. De esta manera, disminuyó en un 78.5 por ciento las quejas recibidas por los órganos autónomos en la materia.